viernes, 29 de agosto de 2014

ODA A LA FAROLA


Farola esbelta cansada,
figura muerta agotada,

dúctil metalizada,

en aceras olvidadas.
Que llora especulando
para que llegue ya el día,
espera sola cantando,
con la luz de la utopía.
Carreteras ilumina
que conducen a la nada,
grita al cielo y lo culmina,
por verse al fin apagada.
Farola esbelta,
dúctil metalizada,
ciprés de las carreteras,
fiera y sombra en las aceras.
Cuan pronto crece el asfalto,
se dejan ver bien tus tallos,
apenas se ha construido,
haces del camino un nido.
Apenas vales de nada,
como pronto te hacen gala,
de iluminar los caminos,
donde habita la guadaña,
donde construyen prejuicios,
y avanzan las malas sañas.
Serpientes, víboras y hienas,
Que esqueletos tuyos plantan,
coronando las montañas,
pese a que nunca hagas falta.

Composición creada tras contemplan miles de alineadas farolas en lugares desérticos e inhabitados, fruto de la especulación urbanística y empresarial.

viernes, 16 de mayo de 2014

CRÍTICA AL EXISTENCIALISMO SARTRIANO

En este ensayo voy a exponer de forma crítica mi visión respecto al pensamiento existencialista de Jean-Paul Sartre.


Sartre considera que la existencia humana no es fruto de la creación de Dios, sino que es la persona la responsable de su existencia al ser consciente de ello. Fue cuando el hombre tomó consciencia de su existencia, cuando empezó a existir. Yo, particularmente, sucumbo a sus argumentos pero soy partidario de someterlo a la duda. Si existir es ser consciente de ello, desde una postura existencialista, si el ser humano considera la existencia de Dios, ¿no podemos plantearnos la existencia de un Dios creado por el ser humano? Puede que no debamos partir desde el debate de la existencia o no existencia de Dios, o de una posible dependencia en nuestra existencia, porque ¿en qué no tengo que creer? Sartre aboga por poner al hombre en posesión de lo que es, haciéndolo responsable total de su existencia. Compartiendo todo lo referido a la angustia existencialista, considero que la falta de angustia es falta de consciencia, consecuencia del desconocimiento. Huir de la realidad, o de la libre elección del ser, de la propia consciencia, es no querer vivir en la angustia, no darse cuenta de las cosas. En ese sentido, tengo una postura totalmente existencialista, ¡qué bien se vive en la ignorancia! Imaginemos que aquellos que omiten su responsabilidad para con la humanidad entera están sometidos en un sueño del que no quieren despertar pese a notar el pellizco de la realidad que les rodea. Para Sartre, tener conciencia de algo es el paso previo a ser consciente de que tienes conciencia. Pero, ¿cuál es el paso previo a darse cuenta de las cosas?, ¿qué es necesario para que la gente despierte de esa ignorancia? Una postura es quietista si se queda en una mera aspiración y no en una realización de actos. Al contrario que Sartre, creo que las aspiraciones, las empresas en potencia, definen también al hombre. Las aspiraciones son el principio de los futuros actos. Jean-Paul Sartre como literato escribió La infancia de un jefe, una obra que tras adquirir conocimientos de la filosofía existencialista se entiende mejor. El protagonista, Lucien, es un ser condicionado por sus complejos y por la sociedad. Es libre, en cualquier momento, de cambiar y actuar con valentía y firmeza pero, ¿se comporta como un cobarde?, ¿o simplemente no tiene inquietud? Quien siente esa imperiosa necesidad de no permanecer impasible, esa necesidad de hacer algo por uno y por los demás no entiende las posturas cobardes. La gente no es desgraciada por necesidad, lo es por los actos que realiza, por la ignorancia, por una cierta quietud. Sartre dice que el hombre nace libre, responsable y sin excusas pero, yo no estoy de acuerdo. El poder de la alienación cercena la libertad del hombre. Quizás, el hombre es libre dentro de unas posibilidades concretas y un determinado contexto, pero no de sus deseos. En el mundo no todos compartimos el mismo grado de libertad, en cuanto no hay igualdad en la posibilidad de realización de los actos, tenemos que reconocer que no compartimos la misma libertad. Creo que Sartre habla desde una postura privilegiada, gozando de un poder que le permite hacer estas reflexiones. Un burgués roto en lamentos. Veo dos posturas antitéticas en la idea de libertad de Sartre, un hombre no nace libre, se libera. Sartre dice: “ser libre no es elegir el mundo histórico en que se surge, sino elegirse en el mundo, cualquiera que éste sea”. ¿Qué hay menos libre que nacer?, ¿qué hay menos libre que existir?, ¿cómo podemos creer que la libertad es independiente de los contextos que la rodean? No estamos condenados a ser libres, estamos condenados a existir. Si no se es dueño de los actos que forjan el ser, no podemos contemplar la total libertad. Creo que el ser humano se hace libre, se responsabiliza y es dotado de argumentos en los que no debe excusarse. El propio Jean-Paul Sartre reconoce que hay personas coartadas de su libertad en una de sus frases más célebres: “temblad ante el esclavo cuando rompe sus cadenas, no tembléis ante el hombre libre”. Deduzco de esto, que un hombre libre puede decidir vivir en la quietud pero, el hombre que es esclavo y carece de libertad, no puede ser compasivo cuando esta es alcanzada. Si a eso se refiere, estoy totalmente de acuerdo.


Para concluir, a mí el existencialismo sartriano me ha contagiado, de una u otra manera, su negatividad, su pesimismo y su incapacidad para confiar en el ser humano. No podemos obviar que desarrolló su filosofía dentro de un contexto histórico convulso. Fue soldado del Ejército Francés. En la 2ª Guerra Mundial fue capturado por los nazis y estuvo prisionero en campos de concentración durante 9 meses. Se solidarizó con el aquel Mayo Francés, apoyó la Revolución Cultural china y se mostró partidario de la Revolución Cubana. Creo que todo esto, y muchas más cosas, marcaron para siempre su vida convirtiéndolo, quizás, en uno de los filósofos más militantes que he leído después de Chomsky. Si algo tengo que destacar en la filosofía de Sartre es que sea una filosofía de acción, no contemplativa. Reitero mi disensión con la idea de Sartre de que no hay ser en potencia y de que todo lo que existe está en acto. Yo creo que todo lo que existe en acto, parte previamente de un ser en potencia. Para terminar quiero resaltar una paradoja que nos presenta el existencialismo sartriano. Por una parte parece fomentar la quietud y el pesimismo, pero por otra es optimista porque responsabiliza al hombre de su ser mediante la suma de sus actos.

viernes, 4 de abril de 2014

MARIANO RAJOY EN LOS INFIERNOS






Maldito, que ni una parte de tu carne humana pueda jamás juntarse a algún hueso,
que en los fuegos más ardientes no te hagas polvo y sufras
como sufrió aquel con su hígado, comido infinitamente por la malvada gaviota.
Son nuestros, son los tiempos arrebatados que quemarán como quema el yugo en el cuero de una res, con todo lo que ya no es de todos. Esperamos que tu sufrimiento corresponda al pago que hemos hecho. Maldito seas cuando llegues al río del olvido, maldito seas cuando las monedas cubran tus ojos, maldito seas cuando comulgues con el nicho que será tu tumba. Te veas en paraíso de flores muertas, falto de verduras y lleno de miles de almas vengadoras de quienes fuiste verdugo. Maldito seas, muerto en paz muerto, como el héroe en el destierro, vivo en pena y dando guerra. Solo y maldito seas, que el espanto de un desierto haga de tu boca pura sed y que "un agonizante río de ojos cortados te resbale y recorra mirándote sin término."

(Cosecha propia) Inspirado en el texto "El General Franco en los infiernos" de Pablo Neruda 

domingo, 16 de marzo de 2014

EL YA CONSABIDO MUNDO AL REVÉS


En el mundo al revés todos los animales hacían lo contrario a lo que tenían que hacer. Los cangrejos andaban para adelante, los castores plantaban árboles, los murciélagos volaban de día, los antílopes comían leones, las tortugas corrían y el leopardo se arrastraba. Las palomas cagaban en el suelo y no en las cabezas de otros animales, los canarios no cantaban, lloraban, los loros hablaban y los humanos repetían. Yo humilde cuervo, decidí ser fiel a mí mismo y no me resigné a ese mundo al revés. No paré de hacer lo que consideraba tenía que hacer. Al mismo tiempo, apelaba al resto de animales para que abrieran los ojos y se dieran cuenta de a dónde estábamos llegando. Al principio, todos me negaron que tuviésemos un problema, pero tras la evidencia no les quedó otra que reconocer que estaban en el error. A partir de ese momento, llegó lo frustrante para este pobre e insignificante cuervo. Un cangrejo andaba para adelante, me animaba a seguir haciendo lo que estaba haciendo. Los murciélagos, a plena luz del día, no paraban de corear mi nombre reconociendo mi labor. Mientras un antílope perseguía a un león, una tortuga corriendo paró para darme la enhorabuena por mi lucha contra ese mundo al revés. Una manada de leopardos, de esos que andaban reptando, no pudo evitar preguntarme cómo iba eso de mi lucha contra el mundo al revés. Un grupo de canarios llorones, palomas bien cagadas y loros que hablaban, le dieron "me gusta" en una foto que subí a facebook, como era de esperar, los humanos repitieron la operación. Y aquí estoy, yo un cuervo y pocos haciendo lo propio. Al final, quiero a todos estos animales ignorantes. 



No es malo estar en el error y no saberlo, eso se llama inconsciencia, lo malo es estar en el error, saberlo, y no hacer nada para salir de él, eso se llama ignorancia. (cosecha propia)

sábado, 15 de febrero de 2014

BIEN ES IDA DEMOCRACIA



Bienvenida dictadura,

bien son idos los derechos,

que canto con amargura,
la muerte sobre mi pecho.
La gente nunca te quiso,
ni defender tu puesto quisieron,
y me hicieron caso omiso,
y pronto se arrepintieron.
¡Qué viene la dictadura!,
los azules con los palos,
¡qué se va la democracia!,
que muchos ya lo avisaron.
Que una vez que se ha ido,
que vuelva ya es muy difícil,
¿cómo será, cómo habrá sido?
preguntaron infelices.
Respondieron oprimidos,
¡qué estabais viendo la tele!,
y mientras cuatro gritamos,
mientras nos daban a palos,
allí estabais vosotros,
mirando desde el estrado,
impasivos e impávidos.
Ahora llora el pueblo entero, 
que ha muerto la democracia,
pero que quede muy claro,
el entierro ya ha pasado,
que llegáis bastante tarde,
que ha muerto desde hace rato,
y mientras unos lloraban, 
con este llanto amargo,
allí riendo estabais, 
de la pena que ahora canto. 


Estoy tan harto. Asesinan a emigrantes. Detienen a personas simplemente por lo que piensan. Censuran con editoriales antiabortistas y, para cargarse el derecho a la información, impiden la entrada de periodistas a una rueda de prensa. Estoy harto. Un chalé que hipotecará Villamediana y una sede que baja la verja y no se acuerda de nada. Pero no me parece algo grave, no, eso no es lo grave.



Lo flagrante, lo humillante es que nadie dice nada. Lo verdaderamente matador es eso, la nada. Nada ni nadie. Y allí estábamos cuatro gatos, cuatro gatos que gritábamos y que tocamos los cojones como nadie, pero cuatro gatos. ¿qué tiene que pasar? Como plañideras a llorar. A llorar por el fin de la democracia y de la libertad. Esto es lo que siento y así lo expreso. Escribo como lo siento y siento lo que ahora escribo, así lo expongo a mi pueblo que deje de ser borrego.

sábado, 4 de enero de 2014

NO ME PUEDO ENFADAR


El 2014 es el año de la recuperación. Así nos lo han vendido  y como todo lo que nos vende este Gobierno, es mentira. No lo digo basándome en ningún indicio salvo el de los sucesivos engaños que hemos sufrido. Aunque fuese verdad no me lo creería por el hecho de salir de sus bocas. Mañana amanecerá como todo los días y lo aseguro sin basarme en nada más que el hecho de que sucede todos los días. De la misma manera mi mente me dice que mienten y no me hace falta reflexionarlo, lo hacen todos los días. 

Pese a esa escasa necesidad de razonamiento por costumbre y esa lógica innata que se despierta, no puedo obviar la realidad. Puedo hablar de mis problemas, de los problemas en general y de los problemas que sufre la gente en particular. Hoy quiero hablar de lo particular, de los problemas reales de personas reales que conozco. De personas anónimas que son realmente las que están levantando, si acaso es verdad, el país con sus sacrificios.
Tengo una amiga que conoce a una amiga que tiene un primo… ¡No!,  tengo una persona cercana que sufre. Una conocida con tres hijas que estas navidades no han comido como se hace en estas fechas y cuyas hijas no se han llevado esa agradable sorpresa de un presente bajo un árbol alumbrado. Ella está sola, una madre soltera que tira de un carro enorme y de la que dependen tres bocas.  No ha sido esa Navidad de alegría y felicidad que los supermercados se empeñan en repetir con cánticos taladrantes, para ellas no.  Un puto pollo, una puta lágrima.

Tampoco ha sido una Navidad iluminada para esa amiga que con hijo a cargo le cortaron la luz. Para ella la Navidad ha sido sufrir a oscuras, ha sido frio, una navidad de manta y velas, de días que se acababan a las 7 de la tarde. Una navidad espectacular por lo cercano a la supervivencia y lo alejado de la dignidad. Una Navidad de escusas, de perder la vergüenza, de olvidarse de los momentos buenos, de ver solo el lado negro de la vida.

Gente desgraciada, en desgracia.  No me puedo enfadar, no me puedo enfadar si las familias no tienen luz en sus casas y mientras las calles destellan con su luz mis retinas, no me puedo enfadar. Tampoco me puedo enfadar por los banquetes que últimamente se han organizado en los entes públicos a costa de todos, no puedo enfadarme mientras familias pasan auténtica necesidad, sufren hambre. ¿Enfadarme? No me puedo enfadar, uno no puede escupir palabrotas, tiene que comedirse, no es suficiente lo que nos hacen. Uno no puede llamarles hijos de puta, ni cagarse en sus muertos, ni puede desearles la muerte. No puedo enfadarme bajo ningún concepto, eso me desautorizaría. Pisa la mano con la que alimento a mis hijos, que no puedo rebelarme con la que me queda libre, no me puedo enfadar.